Se trata de un caso clínico publicado este año 2019 en la Revista Española de Enfermedades Digestivas (The Spanish Journal of Gastroenterology). En él, los doctores Javier Lucas Ramos, Pedro de María Pallarés y Álvaro Pezzela Risueño Atrofia hablan de un caso en el que se observó atrofia vellositaria duodenal con serologías negativas inducida por micofenolato de mofetilo (MFM).
Según publica la revista, a consulta llegó un paciente de 35 años al que se le había trasplantado un riñón, y por ello tenía prescrito un tratamiento crónico con el inmunosupresor MFM. El paciente, lejos de encontrarse bien, sufría diarrea crónica con desnutrición asociada. Durante el paciente fue sometido a un estudio exhaustivo, donde se le realizaron distintas pruebas médicas: análisis de sangre, búsqueda de virus, bacterias y parásitos, pruebas de función hepática, una TC y una colonoscopia. Ninguno de los resultados de estas pruebas daba respuesta a la sintomatología que presentaba. La última prueba realizada fue una gastroscopia, en la que se observó un resultado positivo para atrofia vellositaria (AV), en la segunda porción del duodeno correspondiente con una lesión MARSH IIIc.
Estos resultados, hicieron que los doctores rápidamente pensaran en la enfermedad celíaca. Sin embargo, el análisis sanguíneo realizado con anterioridad, había sido negativo para los anticuerpos específicos de la enfermedad celíaca: antiendomisio y antitransglutaminasas negativos e IgA normal. Pese a que los anticuerpos para el diagnóstico de celiaquía tienen una elevada sensibilidad y especificidad, pueden presentar falsos negativos, y es por ello que los doctores recomiendan completar el estudio mediante test genético HLA DQ2-DQ8. También, se comprobó que no había presencia de microorganismos ni inclusiones de citomegalovirus que pudieran causar la atrofia. Además, también se realizó un PET-TC con el que también pudo descartarse la existencia de síndrome linfoproliferativo.
Con el estudio de todos los resultados, se llegó a la determinación de que la AV podía provenir de un efecto adverso al MFM. Aunque la atrofia vellositara inducida por MFM es un efecto adverso muy infrecuente, pueden encontrarse casos reportados en la literatura. Una vez que se suspendió el tratamiento con MFM, el paciente evolucionó favorablemente, presentando una disminución del volumen de deposiciones diarreicas y presentando una buena tolerancia alimentaria.
Fuente
Revista Española de Enfermedades Digestivas (The Spanish Journal of Gastroenterology)
Año 2019 / Volumen 111 / Número 4
Carta Científica:Atrofia vellositaria duodenal con serologías negativas inducida por micofenolato de mofetilo: no todo es celiaquía
Javier Lucas Ramos, Pedro de María Pallarés, Álvaro Pezzela Risueño