Con el fin de comprobar los posibles desequilibrios nutricionales en las personas que siguen una dieta sin gluten, el grupo de investigación GLUTEN3 de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) ha realizado una revisión detallada de los estudios más recientes disponibles sobre este campo.
La revisión, publicada en la revista Nutrients, hace distinción entre las deficiencias nutricionales que caracterizan a los sujetos no diagnosticados o diagnosticados recientemente de enfermedad celíaca. Según los estudios examinados por el grupo de investigación vasco, los pacientes en el primer año de dieta sin gluten presentan anemia, niveles bajos de vitamina D, hierro y ácido fólico, así como una albúmina baja. En los pacientes celíacos al iniciar la dieta sin gluten se restaura la mucosa, permitiendo una recuperación paulatina de estas deficiencias. No obstante, hay que tener en cuenta que esta recuperación varía de persona a persona en relación a la gravedad de las lesiones mucosas y la duración de la enfermedad no tratada. Una vez restaurada la funcionalidad de la mucosa intestinal, y mientras el paciente siga llevando una dieta estricta sin gluten, será necesario comprobar si aún presenta desequilibrios nutricionales.
posibles desequilibrios nutricionales en quienes siguen una dieta sin gluten
Según los estudios que han sido revisados, los pacientes celíacos que siguen una dieta sin gluten presentan una baja ingesta de carbohidratos complejos y fibra y una alta ingesta de grasas (particularmente grasas saturadas) y azúcares simples. En relación a los micronutrientes, los déficits más importantes resaltados en la revisión están relacionados con el hierro, calcio, magnesio y vitaminas D y E y del grupo B. Hay que prestar especial atención a estas deficiencias, ya que aumentan el riesgo de enfermedades como diabetes, osteoporosis y anemia, que de por sí, ya tienen tasas de incidencia más altas en los sujetos celíacos.
Comparación con la población general
También es de gran interés la comparación que se presenta con la población general, para comprender por qué los celíacos presentan una ingesta energética y proteica más baja, a la vez que problemas de exceso de grasa y una menor ingesta de fibra y vitaminas E y D. Las deficiencias de magnesio, selenio, hierro y zinc son también son más significativas en los celíacos. Los autores concluyen que en los pacientes que siguen una dieta sin gluten: “el consumo de macronutrientes se caracteriza por una baja ingesta de carbohidratos complejos y fibra y una alta ingesta de grasas y azúcares. Las deficiencias de micronutrientes más evidentes suelen ser las de hierro, calcio y magnesio, además de las vitaminas D, E y algunas del grupo B ". Y añaden: “es necesario seguir a los celíacos y promover la educación nutricional entre ellos, ya que podría ayudar no solo a obtener una dieta sin gluten, sino también equilibrada”.
Las pautas para una dieta sin gluten equilibrada
Las pautas proporcionadas por los autores de este estudio para una dieta sin gluten equilibrada, parten de una verificación de las deficiencias nutricionales e incluyen un mayor consumo de alimentos de origen vegetal (frutas, verduras, legumbres, frutos secos, cereales y cereales integrales sin gluten y pseudocereales, como quinua, amaranto, chía) con el fin de reducir la ingesta de grasas y azúcares y aumentar la de fibra, vitaminas y minerales. Del mismo modo, se recomienda aumentar la ingesta de lácteos y legumbres para aumentar el hierro y el calcio.